La situación más grave se registra en el sur del país, dijo el funcionario tras una reunión de la Comisión Permanente para la Prevención, Vigilancia y Acompañamiento de los Efectos de la Sequía.
Las previsiones del Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera(IPMA) apuntan a algunas precipitaciones en las próximas semanas, que "ayudarán al país", pero no cambiarán la situación de sequía, dijo el ministro.
La costa del Alentejo y la zona del Algarve, en particular la parte occidental, son las más críticas y las zonas con "mayor estrés" en relación con la sequía, dijo Duarte Cordeiro.
Los embalses analizados por la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente(APA) están al 72% de su capacidad, frente al 58% de agosto del año pasado y el 57% de octubre, a principios del año hidrológico.
"Estamos en mejor situación que el año pasado, pero una vez más la situación es muy asimétrica en el país", asumió el ministro, añadiendo que en relación con el Algarve el contexto es peor que el año pasado.
El volumen de agua en las presas del Algarve es un 30% inferior al del año pasado, en esta época del año.
Duarte Cordeiro dijo que las medidas para mitigar los efectos de la sequía dieron lugar a una reducción del 14% en el consumo de agua para uso agrícola en el este del Algarve.
"También pudimos ampliar el uso de agua reciclada a dos campos de golf más en esa parte del territorio", explicó.
En cuanto al consumo de agua en el Algarve, la reducción fue de unos cinco hectómetros cúbicos en comparación con el año pasado.