"Será necesario contar con un plan de acción que tengamos la oportunidad de presentar al Parlamento. Ya he pedido al ministro de Asuntos Parlamentarios y al ministro de la Presidencia que inicien un diálogo con los grupos parlamentarios sobre este asunto la semana que viene", dijo Luís Montenegro.

El objetivo es presentar aportaciones para diseñar "un plan de acción, de aplicación inmediata, que pueda resolver los cientos de miles de atrasos y que pueda, en el futuro, evitar nuevas acumulaciones".

"Es nuestro propósito seguir siendo un país que acoge e integra pero, para dar dignidad, debe haber una mayor regulación y dejar de permitir el abuso de lo que hoy son disposiciones contenidas en nuestra legislación", dijo.

En la parte final del debate, en respuesta al líder parlamentario del PSD, Hugo Soares, el primer ministro dijo que los problemas que existen hoy en la AIMA (Agencia de Integración Migración y Asilo) son "delicados y profundos".

"A nadie le gusta ver las condiciones indignas en las que se ven sometidos muchos seres humanos que vienen a nuestro país a trabajar", lamentó, y añadió que las largas colas y los retrasos que se han producido en AIMA generan malestar y sensación de inseguridad.

Para Montenegro, los problemas registrados en el AIMA son "el resultado de varios errores acumulados en las políticas de control fronterizo y de acogida".

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