El vuelo de easyJet, que viajaba de Agadir (Marruecos) a Glasgow (Escocia), tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Faro, debido al comportamiento perturbador de un pasajero que causó problemas de seguridad, escribe el británico New Channel.

La policía portuguesa sacó del avión al pasajero, que fue detenido.

"Una vez que el pasajero salió del avión, el vuelo pudo continuar hacia Glasgow", declaró un portavoz de la aerolínea, añadiendo que "la tripulación de cabina está entrenada para evaluar todas las situaciones y actuar rápida y adecuadamente para garantizar la seguridad del pasajero en el vuelo".

El portavoz también afirmó que este tipo de incidentes son "poco frecuentes", que se toman "muy en serio" y que "no se toleran los comportamientos perturbadores a bordo".

"La seguridad y el bienestar de nuestros pasajeros y tripulación es siempre una prioridad absoluta para easyJet", ha subrayado.