La compañía aérea de bajo coste Ryanair ha confirmado que ha presentado una demanda ante el Tribunal de Circuito irlandés reclamando más de 15.000 euros por daños y perjuicios contra un pasajero que interrumpió el vuelo FR7124 de Dublín a Lanzarote el 9 de abril del año pasado.
Según la compañía: "El comportamiento inexcusable de este pasajero obligó a este vuelo a desviarse a Oporto, donde se retrasó toda la noche, causando a 160 pasajeros trastornos innecesarios, así como la pérdida de un día completo de sus vacaciones. Es totalmente inaceptable que los pasajeros que trabajan duro para disfrutar de un viaje con la familia o los amigos se vean privados de ese placer por la falta de comportamiento de un pasajero".
La aerolínea continuó señalando que están "comprometidos a garantizar que todos los pasajeros y la tripulación viajen en un entorno seguro y respetuoso, sin interrupciones innecesarias causadas por un pequeño número de pasajeros indisciplinados". Ryanair tiene una estricta política de tolerancia cero hacia la mala conducta de los pasajeros y seguirá tomando medidas decisivas para combatir el comportamiento indisciplinado de los pasajeros en los aviones en beneficio de la gran mayoría de los pasajeros que no perturban los vuelos".
En palabras de un portavoz de Ryanair: "Es inaceptable que los pasajeros -muchos de los cuales se dirigen con la familia o los amigos para disfrutar de unas relajantes vacaciones de verano- sufran trastornos innecesarios y una reducción del tiempo de vacaciones como consecuencia del comportamiento de un pasajero indisciplinado. Sin embargo, este fue lamentablemente el caso de los pasajeros de este vuelo de Dublín a Lanzarote el pasado mes de abril, que se vio obligado a desviarse a Oporto como resultado del comportamiento perturbador de un pasajero individual, causando 15.000 euros en alojamiento, gastos de pasajeros y costes de aterrizaje. Ahora hemos iniciado un procedimiento civil para recuperar estos costes de este pasajero.
"Esto demuestra sólo una de las muchas consecuencias a las que se enfrentarán los pasajeros que perturben los vuelos como parte de la política de tolerancia cero de Ryanair, y esperamos que esta acción disuada de más comportamientos perturbadores en los vuelos para que los pasajeros y la tripulación puedan viajar en un ambiente cómodo y respetuoso."
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