"No tengo ninguna duda de que esta asociación reforzará la cooperación militar entre nuestros dos países, intensificará las ya excelentes relaciones bilaterales y los fuertes lazos diplomáticos, comerciales y culturales que unen a Portugal y Estados Unidos", declaró Nuno Melo.

El ministro intervino en una ceremonia que tuvo lugar en el Ministerio de Defensa Nacional, en Lisboa, y que marcó la adhesión de Portugal al "U.S. National Guard Bureau's State Partnership Program", un programa de la Guardia Nacional de Estados Unidos, en el que participan más de cien socios a nivel internacional.

Junto a la embajadora de EE.UU. en Lisboa, Randi Charno Levine, Nuno Melo afirmó que Portugal y EE.UU. son "aliados históricos", destacando que, como fundadores de la OTAN, los dos países han contribuido "a la preservación de la paz y la seguridad en el área euroatlántica" en los últimos 75 años.

"Este es un hito de un paso significativo en nuestra cooperación en el área de defensa, en la que Estados Unidos sigue siendo un socio absolutamente estratégico, pero cuya importancia debemos, sobre todo, destacar porque se trata de una asociación que refuerza la cooperación militar de las Fuerzas Armadas con la que es la principal potencia a escala mundial", destacó el ministro.

Este programa norteamericano, creado en 1993, prevé la realización de ejercicios conjuntos, en los que participarán las Fuerzas Armadas nacionales, el intercambio de conocimientos especializados en respuesta a catástrofes y "esfuerzos de colaboración para hacer frente a los desafíos mutuos de seguridad y defensa".

"Son las Fuerzas Armadas las que se refuerzan con la Guardia Nacional, y es la Guardia Nacional de Estados Unidos la que también se enriquece con la cooperación directa de las Fuerzas Armadas y de los militares portugueses, que tienen mucha experiencia", destacó Nuno Melo.

El ministro destacó la "cooperación muy productiva" que ha mantenido en los últimos meses con la embajadora Randi Charno Levine -que ya ha anunciado que dimitirá de su cargo la próxima semana, en vísperas de la toma de posesión de Donald Trump- y afirmó que su compromiso fue "decisivo" para la culminación de la adhesión de Portugal a este programa.

Randi Charno Levine también destacó que la relación entre Portugal y Estados Unidos en materia de seguridad "es uno de los aspectos más fuertes" de los lazos bilaterales entre ambos países.

"Estados Unidos y Portugal comparten un compromiso inquebrantable con la seguridad global, arraigado en décadas de asociación y despliegues globales compartidos", subrayó la diplomática que asumió el cargo en Portugal en 2022.

Randi Charno Levine destacó que el proceso de adhesión al "Programa de Asociación Estatal de la Oficina de la Guardia Nacional de los Estados Unidos" "es altamente competitivo" y que el hecho de que Portugal haya sido seleccionado "demuestra la consideración que el Gobierno y las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos tienen por las Fuerzas Armadas portuguesas y que están entusiasmados por trabajar juntos".

La embajadora sostuvo que la ubicación estratégica de Portugal y sus contribuciones a las misiones de la OTAN "subrayan su papel vital en la salvaguarda de la alianza transatlántica", confesando que algunos de sus mejores recuerdos en el cargo los pasó en compromisos militares.

"Nuestra cooperación en materia de seguridad es sólida y variada", subrayó la embajadora, que definió la Base Aérea de Lajes, en las Azores, como "el símbolo más tangible e importante" de esta cooperación militar, una infraestructura en la que el Gobierno estadounidense "ha invertido más dinero que nunca en 2023".