Según la información facilitada por Protección Civil, estos incidentes fueron provocados por fuertes vientos y, en su resolución, se vieron implicados 24 elementos y 10 medios terrestres.

La mayoría fueron daños estructurales (cuatro), registrándose también dos señales de alerta y un derrumbe.

El desprendimiento se produjo en un tramo de la carretera regional 107, entre Curral das Freiras y Sítio Colmeal, y no causó heridos.

Según la Protección Civil regional, están cerrados los accesos al litoral en el municipio de Câmara de Lobos, una zona peatonal en el paseo marítimo de Ribeira Brava, en Calheta, y el Cais da Ponta da Oliveira, en el municipio de Santa Cruz. También se cerró el acceso al muelle de Porto Santo.

Hay otras carreteras en las zonas altas de Madeira cuyo acceso también ha sido restringido.

La capitanía de Funchal ha prorrogado hoy los avisos de mala visibilidad y mar gruesa y vientos fuertes hasta las 6:00 horas del viernes.

Los avisos, que se basan en información del Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera(IPMA), señalan que el viento soplará del oeste y será "en ocasiones muy fuerte (62-74km/h) durante la tarde".

El oleaje será del noroeste, alcanzando hasta 5,5 metros en la costa norte, mientras que se esperan olas de hasta 4,5 metros en la parte sur de la isla.

La autoridad regional refuerza las advertencias a la comunidad marítima y a la población en general, recomendando que se refuercen y amarren las embarcaciones y que se eviten los paseos por el paseo marítimo, así como la pesca recreativa.

Porto Santo Line, empresa responsable del buque Lobo Marinho, que realiza el transporte marítimo entre Madeira y Porto Santo, ha cancelado los viajes previstos para hoy debido al mal tiempo.

El IPMA ha puesto al archipiélago de Madeira bajo aviso amarillo debido a los fuertes vientos y al mar agitado.