"La huelga empezó a medianoche y los resultados son bastante favorables, con mucho apoyo, sobre todo en escuelas y hospitales", dijo Diogo Nina, del Sindicato Nacional de Trabajadores de Servicios y Entidades con Fines Públicos(STTS), que convocó la huelga.
Según el dirigente sindical, la huelga "debe ser de entre el 90% y el 100% en algunos lugares", principalmente en escuelas, hospitales y centros de salud.
En el sector sanitario, la huelga está "aplazando consultas y muchas cirugías programadas", dijo Diogo Nina en declaraciones frente al Hospital Santa Maria, en Lisboa, sin dar cifras.
La delegada sindical Matilde Pereira añadió que, en torno a las 8.45 horas, varios colegios del país estaban cerrados, pero también sin necesidad de estarlo.
"En Gaia [en Oporto] todas las escuelas están cerradas, un escenario similar en varias regiones del país", dijo la dirigente sindical, refiriéndose a los datos de participación en la huelga en el sector de la salud para más tarde.
Diogo Nina destacó que la huelga es para toda la administración pública, con la expectativa de que la participación aumente en los turnos de mañana y tarde, ya que en el turno de noche había servicios mínimos.
Debido a la huelga de los funcionarios afiliados al sindicato que la convocó, se esperan impactos en los servicios públicos de los sectores de educación, salud, Receita Federal e Instituto de Registros y Notariado(IRN).
El presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de Servicios y Entes Públicos (STTS), que convocó esta huelga, dijo previamente a Lusa que se espera una "participación masiva".
"La huelga es nacional, para todos los trabajadores, independientemente de su situación laboral y carrera", recordó Mário Rui, destacando que en la enseñanza, por ejemplo, están cubiertos los auxiliares operativos, técnicos auxiliares, auxiliares técnicos y profesores, mientras que en la sanidad podrán adherirse a la huelga profesionales como médicos, enfermeros, técnicos auxiliares sanitarios y auxiliares operativos.
El dirigente sindical destacó que se espera una mayor participación que la ocurrida en febrero, durante la última huelga, señalando que ya hay un mayor interés por parte de los trabajadores, que tienen respuestas a sus preguntas y acceso a más información.
El STTS convocó esta huelga debido a la degradación de las condiciones de trabajo y a la falta de valoración.
En un comunicado, la estructura sindical afirma que los funcionarios están "hartos de salarios bajos, devaluación de la carrera, promesas vacías y una gestión que no reconoce la importancia de los servicios públicos para la sociedad".