"Las carencias de recursos humanos son flagrantes y no vemos cómo esto puede tener un efecto útil inmediato", dijo a Lusa Rosa Ribeiro, secretaria general del STC.

En la actualidad, "las oficinas consulares siguen luchando con las mismas carencias en términos de recursos humanos y las recientes contrataciones aún no han empezado" a trabajar sobre el terreno, dijo, refiriéndose a la contratación de 50 nuevos técnicos anunciada por el Gobierno.

"[El proceso de contratación de inmigrantes] habla de plazos de 20 o diez días [para garantizar los nombramientos] y nos parece, de momento, un poco difícil de garantizar", dijo el dirigente sindical, destacando que ya existen retrasos en las sedes de los servicios consulares.

"La Dirección General de Asuntos Consulares también tendrá trabajo adicional porque tendrá que recibir la documentación, valorar la documentación, ver si está completa y eso es sólo la primera fase", destacó.

"Sobre el papel tiene sentido", pero "la realidad no va a permitir que las cosas sucedan así". "Estamos navegando en la oscuridad", añadió.

Los servicios consulares se comprometen a responder a las solicitudes de visados de trabajo en un plazo de 20 días, en el ámbito de la "Vía Verde" para la contratación de inmigrantes por empresas portuguesas, de acuerdo con el protocolo firmado con las principales patronales.

Esta medida permite la contratación directa en el extranjero por parte de las empresas, después de que el pasado verano el Gobierno decretara el fin de las manifestaciones de interés (recurso legal que permitía la regularización en territorio nacional de quienes llegaban con visado de turista).

Los firmantes del protocolo reconocen que "la inmigración laboral desempeña un papel fundamental en el desarrollo económico de Portugal" y que, "a lo largo de los años, los inmigrantes han contribuido de forma significativa a diversos sectores de la economía portuguesa, aportando diversas competencias, experiencias y conocimientos que enriquecen el mercado laboral e impulsan el crecimiento del país".

El documento reconoce que "una parte significativa de la mano de obra en sectores específicos, como la agricultura, la pesca, la construcción, el turismo y los servicios o la industria, procede del extranjero, y los ciudadanos extranjeros representan, en este sentido, una contribución inestimable a estas áreas económicas, colmando lagunas en el mercado laboral y garantizando la continuidad de las operaciones en diversas actividades económicas".

Las empresas piden programar las solicitudes de visado, reuniendo toda la documentación necesaria, "firmando el plazo de responsabilidad necesario para el trabajador o trabajadores", según el protocolo que entra en vigor hoy.