"A partir del momento en que el tribunal tome esta decisión (...) tenemos que permitir que estas medidas se extiendan a todos los operadores. Nadie entendería que los operadores menos afortunados o que no actuaron contra el ayuntamiento quedaran fuera de estas medidas", declaró Rui Moreira.
En cuestión está el proyecto piloto de restricción del tráfico de vehículos turísticos que comenzó el 1 de octubre de 2024, limitando la circulación de vehículos turísticos en el centro de Oporto.
Sólo un tren turístico y un autobús de dos pisos de subida y bajada libre podrán circular por una zona designada del centro, con permiso municipal.
Los "tuk-tuks" y los autobuses turísticos ocasionales quedaban prohibidos.
Sin embargo, el TAF de Oporto aceptó la medida cautelar interpuesta por 12 operadores turísticos contra el ayuntamiento, habiendo determinado la suspensión de las restricciones en el centro histórico para estas empresas.
Rui Moreira declaró a los periodistas que se trataba de "la primera decisión desfavorable para el municipio".
"No esperábamos este resultado, sobre todo porque la decisión ha sido contraria", señaló, añadiendo que el municipio recurrirá, aunque el recurso no tenga efectos suspensivos.
"A pesar de que la decisión tiene sus efectos limitados a las 12 empresas demandantes, entendemos que esto no puede significar la atribución de ningún monopolio en la ciudad de Oporto", señaló, afirmando que se tomarán "otras medidas".
Aunque las nuevas medidas no han sido diseñadas, el alcalde puso como posibles ejemplos la restricción de la circulación en determinadas calles, el condicionamiento del acceso en determinados días de la semana u horarios y la determinación de los lugares de aparcamiento y de embarque y desembarque de pasajeros.
"Tenemos que empezar de cero, tenemos que hacer un 'reset'. Al hacer un 'reset', ahora tenemos que escuchar a los departamentos municipales, a la Policía Municipal y pensar cómo podemos implementar otras medidas que de alguna manera mitiguen este problema", añadió.
Sobre el proyecto piloto, Rui Moreira afirmó que permitió "calmar el tráfico" y lamentó que la decisión judicial incite al "caos".
En la decisión del TAF, el juez afirma que no es posible "concluir que exista un perjuicio preponderante al interés público que implique la denegación de la medida".
Las 12 empresas interpusieron una medida cautelar contra el municipio para que suspenda la vigencia del concurso para el otorgamiento de cinco licencias de operación de circuitos turísticos y garantice la libre circulación de vehículos de turismo en la zona restringida.
También se suspende el concurso para la concesión de cinco licencias de explotación de circuitos turísticos, añadió Moreira.
Hoy, en declaraciones a Lusa, el director de WildBloom, uno de los 12 operadores con vehículos de hasta nueve plazas que presentaron la demanda, afirmó que, con esta decisión, el tribunal "falla a favor" de las empresas.
"Seguimos disponibles para encontrar una solución porque sabemos que hay problemas de tráfico, pero creo que una disculpa [del Ayuntamiento] no sería mala idea", añadió.
Según datos del Ayuntamiento de Oporto enviados a Lusa, entre el 19 de septiembre y el 19 de noviembre, durante el proyecto piloto, se pusieron 88 multas de tráfico, se retiraron seis vehículos, se bloquearon dos y se decomisaron otros dos.
Se trata de 48 infracciones a vehículos de ocio turístico con capacidad inferior a nueve plazas, cuatro a trenes turísticos, 20 a vehículos pesados ocasionales de pasajeros, 12 a vehículos ligeros ocasionales de pasajeros y cuatro a otros.