El mercado inmobiliario europeo se prepara para un año dinámico en 2025, con Lisboa emergiendo como una de las ciudades más atractivas para los inversores. Según la Encuesta Europea de Intenciones del Inversor 2025, realizada por CBRE, el 70% de los inversores cree que el mercado ya se ha recuperado o se recuperará a lo largo del año, después de las dificultades registradas en 2023.
En el ranking europeo, Lisboa ocupa ahora la 8ª posición entre las ciudades preferidas para la inversión inmobiliaria, lo que refuerza el interés extranjero por el mercado portugués. Francisco Horta e Costa, Director General de CBRE Portugal, destaca que "el sentimiento de los inversores corrobora las previsiones de crecimiento del sector para 2025, representando una señal positiva para el mercado nacional".
"Se trata de una noticia muy positiva que apunta a un año de progreso tanto para el sector en general como para el mercado nacional. Además, en línea con las previsiones de CBRE, la sostenibilidad emerge como un factor de relevancia transversal, y debe ser considerado por todos los agentes como un pilar fundamental en la valoración de sus activos, con el fin de garantizar que la oferta esté en línea con las necesidades de la demanda", añade el directivo.
Portugal no sólo se encuentra entre las 10 ciudades europeas más atractivas para la inversión inmobiliaria, sino que también ocupa el 6º puesto como país con mejor retorno de la inversión. El país se beneficia de rendimientos competitivos y de un sector inmobiliario resistente, lo que atrae la atención de los inversores internacionales.
La encuesta reveló que el 92% de los inversores tienen intención de mantener o aumentar su presencia en el sector, siendo la vivienda el segmento más solicitado, seguido de la logística y los hoteles. Por primera vez, la vivienda se considera el sector más atractivo, con un 32% de los inversores que lo señalan como prioritario. Los hoteles y los espacios logísticos también muestran expectativas de revalorización, con aumentos previstos del 3% y el 1%, respectivamente.
A pesar de las buenas perspectivas, las oficinas de clase A y el comercio minorista de calle se enfrentan a retos, con previsiones de devaluación del 22% y el 31%, respectivamente. El estudio también indica que los inversores se fijan cada vez más en sectores alternativos, como las viviendas para estudiantes y los centros de datos, que ya han superado en interés a las viviendas para mayores.
La sostenibilidad aparece como un factor determinante en la decisión de inversión, ya que el 95% de los encuestados la considera esencial. Además, el 13% de los inversores admite pagar más por inmuebles con certificación sostenible, lo que demuestra la creciente valoración de las prácticas ecológicas y de eficiencia energética.